Es tu cielo azulado

Es tu cielo azulado

Una de las manifestaciones simbólicas fundamentales del pensamiento místico  occidental, ha sido la visión del cielo, representado desde la Antigüedad en pinturas murales, lienzos, retablos o mosaicos, como afirmación del Panteón cósmico de Roma, y más tarde asociado a la visión cristiana. Este fue un aspecto iconográfico esencial que la  artista Alejandra Rojas Contreras se planteó cuando prospectó su trabajo por vez primera, hace diez años atrás, disponiendo estas pinturas en el muro exterior del ábside del templo mayor de Campus Oriente de la Pontificia Universidad Católica de Chile, lugar donde Alejandra presentó en ese entonces su examen de título llamado Conciencia de Unidad.

El espacio escogido en aquel momento para emplazar las piezas pictóricas, era –tal como hoy- tan importante como las imágenes, donde el edificio, estructurado sobre la base de un diálogo entre círculos y cuadrados, aunaba la relación fundamental entre lo celeste y lo terrestre. El círculo, esa figura que no comienza ni termina, aludía a lo sagrado; al universo inmaterial, mientras el cuadrado, con sus cuatro puntos cardinales, resultaba alusivo a la condición terrestre, lo cual establecía un diálogo concreto con la estructura de ladrillos a la vista –tierra horneada- que da cuerpo al edificio.

La simbología arquitectónica y el conjunto pictórico de la artista se correspondían, siendo en éstas el celeste un color dominante. Precisamente, celeste deriva del latín caelestis que significa celestial; y éste de caelum, que significa firmamento, cielo, o morada de los dioses. En función de ello, en las pinturas predomina un tinte celeste (o azul claro) de saturación intensa, correspondiente a la coloración del cielo diurno despejado.

La obra que Alejandra nos presenta hoy en el Centro Cultural Espacio Matta readecúa la primera propuesta, situando la obra de manera permanente en la entrada este edificio (Proyecto Bicentenario), junto a una gigantografía del Palacio de La Moneda, y cohabitando con el mural “El primer gol del pueblo Chileno” realizado por el surrealista chileno Roberto Matta y la Brigada Ramona Parra en 1971, borrado por la Dictadura militar y restaurado antes de la apertura de este espacio en 2010.

La profunda analogía sugerida por Alejandra, nos ayuda a recordar la orientación espiritual del hombre hacia la luz y hacia aquello que está más allá del ser humano, como la luz solar, la manifestación nocturna de las estrellas y ciertamente el misterio de los cielos azules.

Victoria Jiménez Martínez
Julio 2013